martes, 28 de junio de 2011

Viaje y reflexiones:

 He estado tres semanas en España, trabajando en la central CIRSA. Un trabajo de estandarización de procedimientos de juego para toda la compañía, algo necesario, aunque un poco rollo. Menos mal, que éramos 5 y entre unos y otros lo hemos sacado adelante sin demasiado tedio, dentro de lo que cabe.

Bueno aviso a navegantes, creo que me voy a cascar un buen ladrillo, han sido muchas cosas en este último mes sin escribir ;)

El viaje, aparte del trabajo, pues fue un fin de semana largo en Salamanca, cuando digo largo, son tres días con mi gente,  con un recibimiento… que no tengo palabras, una gran y grata sorpresa, nadie sabe la ilusión que hace encontrarse a los amigos según se sale por la puerta de desembarque, es una sensación increíble, además ver la cara de FLIPE de las personas que esperan a sus familiares en un vuelo Barcelona-Salamanca, y yo con 10 personas, con pancarta y movidas ¡! Difícil de explicar para los que no saben la historia. Gracias por hacerme sentir así. Además de mis colegas, estaban los de siempre, mis padres, siempre ahí, esa es su grandeza, y mi hermana, mi primer abrazo siempre es para ella, no hay nadie en este planeta tan especial como ella, verla me hace feliz, darle un abrazo me hace sentir bien, hablar de nuestras cosas nos hace cómplices, es y será la persona más importante en mi vida SIEMPRE.

Después de este recibimiento, todo fue, comedera bebedera y bailadera, un gran fin de semana en el cual, debo agradecer a mis papis esa fiesta que se organizó en mi casa, lo pase muy bien, y sentí el placer de compartir un ratito con las personas que me quieren y desde luego yo quiero.  Faltaron muchos, pero los que estaban eran importantes, y agradezco desde aquí a mis chicos COMAR (ellos saben quienes son) su esfuerzo por venir, es increíble tener amigos así. Otros amigos como el Alvi, recortaron sus vacaciones por poder verme, esto me hace sentir muy querido y feliz. A mis Carmenes gracias por el esfuerzo, os quiero mucho. Gracias a todos por venir.

Me sentí muy bien en Salamanca, además estuve en Barcelona, mi abuela se puso malita, pero no fue nada, además mi tío, (un tío increíble) y yo fuimos al Frankfurt de Pedralbes, si, a ese que me llevaba mi abuelo, quizá me saben tan ricos los bocadillos porque tengo una historia sentimental con ese lugar, pero siempre está lleno, y siempre es siempre!! Cada vez que voy a Barcelona, voy a este sitio, es un ritual, algo que me llena de esa tristeza/felicidad tan extraña.

Tengo que pedir disculpas a los de Mollet, no tuve el tiempo deseado para verlos, y esa noche aunque especial no fue suficiente. Como siempre en casa de mi tía Isabel, no falto el CHOPED y estaba delicioso, como siempre que entro por la puerta de esa casa, veo a mi tío, en el sofá viendo a Perico Delgado ganar el Tour, que verano aquel, se que una persona tan grande no se debería recordar por estar viendo el Tour, pero que quieren que les diga… ese es mi recuerdo imborrable. Mi tía me ve entrar, y la primera frase que me dice, me desmonta, a partir de ahí se que va a ser un momento de sentimientos.

Los primos nos sentamos a la mesa ¡! Y uno de ellos dice, “lo increíble es que estamos aquí, como si nos hubiéramos visto ayer”,  y es verdad, somos buenos, porque nos queremos sin exigencias, y si estamos juntos, pues nos partimos el culo de la risa, con conversaciones sobre bostezos anales, que mejor no desciframos aquí. Hubo algunos sentimentalismos, por situaciones de noviazgos rotos,  y ni así, hubo seriedad ¡! Esos Hippies ¡!





Los Hippies en este caso son Raúl y David, hermanos,  recientemente para mi, bautizados como  TOPODUO CREPS, bueno el caso es que se han montado una película y se van a hacer la temporada de fiestas de pueblos con una crepería ambulante, sinceramente me dan envidia, de la buena, de ver como son tan felices y tan ingeniosos para serlo, desde aquí mi admiración y mi respeto.

Entre todo este maremágnum de cosas, decir que mi tío Chuchete, el cual fue a mi fiesta, se ha montado una WEB acojonante www.lagardeideas.com , la que recomiendo a los que tengan ganas de pensar y sentir, a los demás … interviú.es, esa es vuestra Web. Gracias  a esta WEB he encontrado una canción preciosa, de un tipo que por lo que dice en sus canciones debe ser especial, como lo es para mí, ese tío, con el cual me hubiera gustado compartir más cosas, más conversaciones, no hay culpables en la situación, pero envidio a los que lo han podido disfrutar más. Desde aquí mi reconocimiento y mi agradecimiento por TODO, pero sobre todas las cosas, por el trato y el amor que mi familia y yo sentimos de ti y de los tuyos, tu presencia en la fiesta, nos llena de felicidad y de orgullo de tenerte entre los nuestros.

Muchos pensareis que este no es el foro para decir estas cosas, pero en realidad nadie me lee con lo que si no lo es, me siento bien pensando que cualquier persona de este plante puede leer lo mucho que os quiero.

Abrazos desde Bogotá, viviendo la vida, como siempre a TOPE

lunes, 27 de junio de 2011

El crimen que no nos conmovió / Voy y vuelvo

Como ando falto de tiempo e ideas, os pongo un articulo de un periódico de Bogotá, vosotros mismos opináis. 

Fue un balazo certero. Uno para cada una. En la cabeza. Imagino la escena: en medio de la tenue luz de las 8 de la noche, frente a una casa humilde, en un barrio donde el atraco es pan de cada día y la venta de droga gira alrededor de pequeñas mafias. Allí, sobre el piso de tierra, quedaron los cuerpos y la sangre de Sandra Patricia Rocha, de 14 años, y de Érika, su hermana, de 7.
Los sicarios, según las autoridades, tendrían la misma edad de Sandra: menores que huyeron por la esquina, por el potrero, por el caño, por cualquier reducto. ¿Quién vio? Nadie vio, o tal vez sí. No se sabe.
Veinticuatro horas antes del crimen de las hermanas, otro menor, Fredy Andrés, de 11 años, también caía víctima de una bala perdida.
Previo al fatídico instante en que la muerte se llevó a Sandra y Érika, el país asistía a un foro sobre la Constitución del 91. Se habló del Congreso, las pensiones, la reelección, la sostenibilidad fiscal. También había expectativa por el partido de la Selección Colombia contra México y Poncho Rentería contaba que las señoras estrato 6 querían protestar por los trancones.
La noticia -como toda noticia- pasó como una más. Los noticieros la registraron, los periódicos la reseñaron, voces aisladas censuraron el hecho, algunos 'tuiteros' se indignaron, los candidatos siguieron en sus campañas, el editorial de El Espectador condenaba la restricción a la venta de alcohol (al pequeño Fredy lo mató un hombre borracho, en la calle); EL TIEMPO pedía al alcalde Moreno renunciar; el presidente Santos saludaba a la Selección y el del Congreso, Benedetti, se ufanaba: "Nos hicimos respetar del Ejecutivo". Ah, y la Policía ofrecía $ 20 millones para dar con los responsables del crimen.
Pero Sandra y Érika ya eran una cifra más en la convulsionada localidad de Kennedy, la de los 245 homicidios el año pasado y los 98 en lo que va de este. Niñas, sí, pero una cifra más. De malas -dirán los insensibles-, eran pobres, vivían en un sitio peligroso, al lado de invasores a los que el alcalde local prometió sacar; a pocas calles de Patio Bonito, uno de los tres barrios más inseguros de la ciudad, según la Corporación Nuevo Arco Iris. No hubo marchas, ni protestas, ni líneas abiertas para opinar. En cambio, meses atrás, el país se desgarró en argumentos a favor y en contra del futbolista que pateó una lechuza en un campo de fútbol. Hubo más de 200.000 visitas a eltiempo.com y 125.000 más cuando se supo que el pájaro había muerto. ¿Cuántas visitas suscitó el crimen de Sandra y Érika, baleadas frente a su casa? Menos de 60.000, me confirmó Diego Santos, editor jefe de eltiempo.com, uno de los pocos 'tuiteros' indignados.
¿Quién asesinó a estas dos hermanas?, ¿a dos pequeñas que no tuvieron la culpa de nacer pobres?; ¿qué culpa tenía Sandra de despertar apetitos de acosadores y depravados?, ¿qué culpa tenían las dos si su crimen obedeció a una venganza o a un ajuste de cuentas?; ¿qué culpa si les tocó vivir en un lugar donde hay menos de un policía por barrio? Ninguna. No son responsables de balas asesinas que zumban en la noche ni de la indiferencia de una ciudad a la que le da lo mismo el asesinato de dos niñas que el zapatazo a una lechuza, y que si se acuerda de protestar, es por los trancones.
¿Todo esto será lo que las autoridades llaman percepción de inseguridad?
Definitivamente, algo va de la indiferencia colectiva al gesto de esos niños que hicieron un plantón frente a la casa de Sandra y Érika para protestar por el crimen de sus vecinitas. Esa sí es una lección.
Ernesto Cortés Fierro
Editor Jefe EL TIEMPO
erncor@eltiempo.com